lunes, octubre 17, 2011

Andando por la playa


"Permanece firmemente establecido en el Yoga, oh Arjuna, emprende acciones, aparta el apego y permanece impasible y ecuánime tanto en el éxito como en el fracaso. La ecuanimidad recibe el nombre de Yoga."

cap.2/48 Bhagabad Gita

Hace 2.500 años, es decir hace muchísimos, muchísimos años, los hombres ya eran sabios, y creo que no tan distraídos en lo externo, dedicaron tiempo en ahondar en lo interno. De ahí surgió esta gran obra, y he cogido un pequeño párrafo que tiene que ver con ideas, sensaciones que me rondan desde hace tiempo y que he ido plasmando en el blog.


Desde hace un tiempo, los domingos trato de ir a la playa, y pegarme un baño reponedor. Voy a una playa muy hermosa donde no hay mucha gente y hay unos increíbles acantilados.  Cada vez que voy  me doy unos baños estupendos, o corro olitas encima de una tabla de body surf. Luego ando por la playa. Siento la arena en los pies. Miro las conchas. Levanto la vista y veo el horizonte por un lado y los acantilados por otro. Todo ello me recoloca de las clases de yoga, de los cursos de formación, de la cotidianeidad, de lo habitual. Digamos que "bajo a tierra", y si hay alguna agujeta por las clases, luego me encuentro mejor; y si hay temas que me rondan o me preocupan, el pisar la arena me reubica.



A veces la mente nos pone un filtro de blanco y negro, y entramos en un bucle. Y cuando pisamos toda nuestra realidad es gris. Nos resulta difícil salir de ello.

Posiblemente el yoga sea una herramienta estupenda para dar paletadas de color, para distanciarnos un poco a veces de tanto bucle gris, para educar la mente en aspectos que nos permitan crecer interiormente, para ponernos en contacto con nosotros de un modo fluido, y no quedarnos estancados. Para ver por igual desde un centro que tiene solidez.



Corremos tanto en busca de algo que no existe que perdemos de vista nuestro pies, perdemos de vista la sensación de pisar la tierra, de sentirnos en ese momento plenos con nuestro presente, de valorar y entregarnos plenamente a ese momento, sin estar tan condicionados por aquello que nos paso, o por alcanzar algo que pensamos que nos va llenar. Es decir, muchas veces no nos damos cuenta y desperdiciamos nuestro presente por no estar presentes.  Y la vida pasa.


A veces, ahí dentro en el mar, flotando, mientras espero una buena ola, noto como el agua inconmensurable me mece, y me doy cuenta que soy algo pequeño, y siento que el agua me relaja y que cuanto más relajado estoy, mejor floto. A veces la fuerza de la ola puede conmigo, pero confío en mis fuerzas, me siento bien, y no pasa nada. Todo tiene más color cuando uno aprende a flotar, ante las olas grandes, o las olas pequeñas, ante aquello que la inmensidad el mar me quiera traer, yo lo acepto, me adecuo, me adapto, y vuelvo a la orilla, agotado, pero feliz de sentir tierra, de haber sido uno con el mar.

Jack Johnson - Breakdown 

ah
 y voy a repetir un video que me encanta y creo que enlaza con lo escrito

Jack Johnson - You And Your Heart 

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